Una cocina con colores

2019-06-28 ¿Cuál es tu color preferido? ¿Prefieres los colores intensos o te decantas por los tonos más neutros? ¿Te gustan los colores cálidos o los tonos brillantes y fuertes? Independientemente de tus preferencias, todos vivimos en un mundo lleno de color. Nuestro mundo se expresa mediante el color de las formas más hermosas y complejas. Nos muestra los tonos tranquilos del blanco y el gris en invierno, los matices pastel de la primavera hasta la animada exhuberancia de los verdes durante el verano, y obviamente los tonos rojizos, marrones y dorados del otoño.  
El color también es un instrumento de expresión personal. Los colores que elegimos para nuestra ropa y para la casa son la directa expresión de nuestra personalidad, de nuestros estados de ánimo y preferencias. Muchos de nosotros sin embargo son reticentes a usar colores demasiado expresivos en la decoración. A menudo elegimos colores obvios como el blanco crema, gris, beis y como máximo damos un toque de color con los cojines o una manta, para aportar algo de personalidad. Aunque resulta interesante que casi todos, al entrar en un espacio vistoso o coloreado, se sientan inspirados o se descubran pensando que les gustaría saber arriesgarse un poco en su propia casa.
El tema del color es una cuestión muy delicada cuando se trabaja con los clientes. No es muy frecuente tener clientes que se encuentren cómodos con el color o para los que sea fácil elegir uno. A nosotros estos momentos nos resultan casi divertidos porque nos damos cuenta de que nuestros clientes desean aportar más personalidad y animación a sus casas, pero en cierta medida es como si tuvieran miedo de usar el color como instrumento para expresarse. “¿Y si este color deja de gustarme dentro de unos años?” “¿Y si este otro hace que la habitación parezca más pequeña?” “¿Igual este color es demasiado fuerte?” “¿Se adapta este color a los muebles, a los sofás o al suelo…?” ¿El resultado? Espacios beis con un cojín de color brillante.
 
Hablando en serio, entendemos perfectamente que para una persona con poca o ninguna experiencia sobre la teoría de los colores pueda resultar muy difícil elegir uno con absoluta seguridad. Por eso nos encanta dar a nuestros clientes algún que otro consejo práctico a la hora de elegir un color.
La cocina se suele descuidar en el momento de añadir o elegir un color. Las cocinas que solemos ver en las casas de nuestros clientes son blancas, de color madera y/o grises. Incluso cuando instalamos una nueva cocina, el cliente en general elige el blanco, el color madera y/o el gris. ¿Crees que tú también lo harías?
 
Nosotros en ZWEI Design creemos que la cocina sea una gran ocasión para elegir y usar el color. La cocina es el espacio donde la vida, la alegría, la tensión y muchas otras emociones más se manifiestan día tras día. Es donde se prepara la comida, se dan fiestas y se escuchan más risas.

En la concepción moderna de la casa la cocina se considera como su centro, así que, ¿por qué no usar este espacio para mostrar nuestra personalidad?

Entonces, ¿te animas a añadir una nota de color? Es más fácil decirlo que hacerlo. Pero no te preocupes, aquí van algunos consejos útiles:
 

1. Descubre cuál es la estación de color que rige en tu casa.
   Empieza a observar tu casa para identificar cuál es la “estación de color” que prefieres. Presta atención para descubrir si predominan los colores más fríos del invierno, los rústicos del otoño o los colores alegres de la primavera y del verano. Si te cuesta determinarlo, dirígete a tu rincón preferido de toda la casa, ¿qué ves? A continuación, pregúntate por qué te gusta. ¿Es un color único? ¿O una combinación de colores? Probablemente esto te ayudará a darte cuenta de tener ya una predilección por cierto color.
    
2. ¿Qué te pones?
   El segundo paso es algo divertido. Abre el armario. Normalmente esto te demostrará cuáles son los colores con los que sientes mayor comodidad. Es bastante habitual que la casa y la ropa tiendan a parecerse en lo referente a los colores, aunque no siempre es así. Tu armario te podría revelar algún color que falta en tu casa. Déjate inspirar por esos colores. Sinceramente, si te sientes bien llevándolos puestos, podrían hacerte sentir bien usándolos en la decoración.
    
3. Hablemos de sentimientos.
Para terminar, procura pensar cómo quieres sentirte en tus espacios. Por ejemplo, termina esta frase "Quiero que la cocina sea…". Intenta completar la frase con algo sencillo, como: divertida, un lugar de reunión, acogedora, cómoda, natural, ecológica o minimalista. Palabras como estas te ayudarán a entender qué emociones debería comunicar el color que elijas.





El diseño

Cuando proyectamos una cocina con colores animamos a nuestros clientes a que elijan un color principal y a usarlo como base para el espacio en su totalidad. Selecciona un par de matices de ese color para romper la monotonía. Por ejemplo, puedes pintar la base de los muebles de la cocina de un tono o dos más oscuros respecto a las puertas.

Llegados a este punto es importante encontrar un material natural que equilibre la vitalidad del color. Hemos elegido la encimera CALACATTA LIGHT con fregadero incorporado de SapienStone para disfrutar de una superficie de lujo pero natural.





A continuación debemos encontrar colores que aporten matices. Para subrayar la frescura de ese rosa, hemos decidido añadir pinceladas de amarillo mostaza para crear un ambiente casi veraniego. La mayor parte de las personas no han estudiado la teoría de los colores, pero para encontrar inspiración se pueden probar algunos calculadores de colores en internet como éste: https://www.sessions.edu/color-calculator/. Son instrumentos fantásticos pero sencillos de utilizar para encontrar la combinación de colores que mejor se adapta a tu casa.
 
Para completar el espacio queríamos encontrar un contraste para la jovialidad de los rosas y amarillos. Para lograrlo ha sido suficiente seleccionar algunos elegantes detalles en bronce y plata y usarlos en todo el espacio.
 
Cuando se trata de color, todo se basa en el equilibrio, y probar ¡es divertido! El objetivo es aportar alegría, vitalidad y personalidad a tu casa. ¡Aprovecha la ocasión!

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