Es fundamental realizar una buena limpieza final para tener un material listo al uso y para eliminar posibles residuos de mecanizado.
Es suficiente utilizar agua limpia y secar con una toalla de papel o, mejor aún, con un paño de microfibra, y la operación debe repetirse hasta que la superficie esté completamente limpia.
También hay que prestar atención a la limpieza de los residuos de resina epoxi que suelen generarse durante las fases de encolado de canto recto, tablas en L y fregaderos.
Los productos epoxídicos se adhieren a las superficies sin ser absorbidos, pero hacen que su eliminación sea bastante complicada tras el endurecimiento completo.
Por lo tanto, es esencial eliminar estos residuos de mecanizado «frescos» utilizando esponjas suaves, paños y productos de limpieza adecuados o recomendados por los mismos fabricantes.
Para la limpieza ordinaria, es suficiente utilizar un paño de microfibra humedecido y un detergente líquido de pH neutro.
EVITA el uso de esponjas abrasivas, estropajos de acero, cepillos duros y detergentes que contengan ácido fluorhídrico y sus derivados.
Evita también detergentes que contengan ceras y/o abrillantadores.
Para las manchas persistentes, limpia con una esponja suave y un producto detergente específico.
Es muy importante no dejar evaporar el producto detergente en la superficie.
Tras haber utilizado productos detergentes de cualquier tipo, es necesario enjuagar bien.